El deporte, más importante de lo que se pensaba

La práctica habitual de actividad física reduce la mortalidad hasta en un 40% y el riesgo a padecer cáncer hasta en el 30%: una auténtica medicina preventiva.
Aunque se tenían muchos datos refrendados sobre la interacción del deporte en la longevidad, con la información recogida en el estudio colaborativo que acaba de ser galardonado con el Primer Premio Nacional de Investigación en Medicina del Deporte, convocado por la Universidad de Oviedo, titulado "Cantidades recomendadas y más bajas de actividad física a largo plazo y mortalidad", se ha determinado que con la práctica deportiva diaria de entre 30 y 150 minutos, se reduce hasta en un 40% la mortalidad y en un 30% las posibilidades de padecimiento del cáncer.
UN PANEL EXTENSO
Se puede considerar un estudio retrospectivo, ya que se han recogido datos de los últimos 23 años, sobre el seguimiento realizado en una población de adultos de 210.327 en Taiwan, aunque el trabajo final ha sido responsabilidad de los equipos de investigación de la Universidad Autónoma de Madrid, el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados en Alimentación y centros de investigación de Taiwán (Universidad Nacional Cheng Kung), Australia (Universidad de Sidney), Estados Unidos (Universidad de Harvard) y Noruega (Norwegian School of Sport Sciences).
SEGUIMIENTO EXHAUSTIVO
En muchos casos la actividad física de determinados individuos fue valorada hasta en 20 ocasiones durante el periodo de seguimiento, para reflejar en el estudio que la actividad física que realiza una persona varía a lo largo de vida.
Para el desarrollo de este trabajo se han efectuado cerca de 900.000 mediciones de actividad física en el tiempo libre, calificando a los participantes en función de las cantidades de actividad física realizada (inactivo, insuficiente o recomendado). Teniendo como pauta válida para considerar que una persona ha realizado el deporte "recomendado", cuando realizaba una actividad física notable entre 150 y 300 minutos a la semana, de los cuales entre 75 y 150 minutos se encontraban por encima del umbral aeróbico (deporte moderado/intenso).
LAS CONCLUSIONES
Al reunir todos los datos obtenidos, se ha llegado a varias conclusiones, como que la asociación entre actividad física y reducción del riesgo de mortalidad es de entre un 15 y un 25% más fuerte de lo que se pensaba: hasta el momento se daba por cierto que la reducción podía oscilar entre un 20 y un 30%, mientras que tras el trabajo se ha comprobado que se sitúa entre un 30 y un 40%. En el caso de la mortalidad por patologías cardiovasculares, que es la principal causa de muerte en el mundo, se eleva hasta el 40%, mientras que se sitúa en el 29% en el caso de la mortalidad relacionada con cáncer.
CUALQUIER EJERCICIO ES BENEFICIOSO
En el estudio también se concluye que el efecto beneficioso protector se obtiene ya con una cantidad pequeña de actividad deportiva, sin necesidad de realizar rutinas de deporte intensivo y continuo: aun no alcanzando la cantidad recomendada, se reduce un 25%, mientras que se eleva al 28% en el caso de la cardiovascular y se queda en el 23% en el caso de la mortalidad vinculada a cáncer. Con esto se demuestra que cualquier nivel de actividad física es importante, y refuerza el lema de la OMS de que "cualquier movimiento cuenta".