Cómo reiniciar tu actividad física y no rendirse

Has estado un largo periodo sin hacer deporte y te has propuesto reiniciar esa actividad? Seguro que ya has notado que cuesta más de lo que en un principio te imaginabas, ¿verdad? Suele ocurrir. Cuando llega el buen tiempo, cuando se acercan las vacaciones nos proponemos de nuevo a correr esos 10 kilómetros diarios o andar a paso ligero esos 6 o 7. Es una magnífica idea aunque bien es cierto que jamás deberías haber abandonado estos hábitos tan beneficiosos para tu salud.
Pero, bueno. A lo que íbamos. ¿Qué consejos deberías seguir para ponerte de nuevo en marcha y no acabar rindiéndote?
Perder el miedo
Si has abandonado tu actividad hace tiempo lo primero que tienes que perder es el miedo a reiniciarla. Seguro que te han entrado dudas si serás capaz de volver a hacer lo de antes.
Pues no te preocupes porque con un poquito de constancia vas a recuperar tu condición física y también vas a poder alcanzar esas marcas de hace unos meses. La fuerza de voluntad es lo principal para cambiar de hábitos.
Marcarte un objetivo
Marcarse un objetivo pero teniendo los pies en el suelo. No estás en forma. Seguro que lo sabes y será duro. Poco a poco irás mejorando pero antes que nada ves paso a paso. Han una lista en la que deberás incluir:
- Objetivos alcanzables, de los que sepas que vas a llegar sin un excesivo esfuerzo que haga que te desmoralices.
- Objetivos que puedas conseguir en un tiempo que consideres razonable.Incrementar el ritmo conforme pasen los días. Primero sería correr 2 kilómetros, luego 3 y así sucesivamente.
- Cuando se empieza a hacer footing, por ejemplo, es muy bueno empezar corriendo 1 minuto y andar 5. Ya verás como poco a poco vas cambiando la tendencia y acabarás corriendo los 10 kilómetros en 60 minutos.
- Es importante que te hagas con una aplicación como por ejemplo una muy popular que se llama Endomondo y que todos los días midas los resultados. Verás como te aumenta la moral de manera rápida.
"Vísteme despacio que tengo prisa"
Esta frase nos sirve perfectamente para explicar lo que vamos a contarte a continuación.
Se ha de "re-empezar" suave, aumentando el ritmo poco a poco. Si tus primeros entrenamientos son muy duros incluso puedes lesionarte porque tu maquinaria muscular todavía no está engrasada. Si has estado mucho tiempo practicando el "sedentarismo" no dudes en hacerlo como te acabamos de indicar.
Lo mejor, claro está, sería contar con la ayuda de un profesional que te pudiera orientar en este sentido. Él sería el más indicado para que supieras a ciencia cierta cuándo aumentar el ritmo sin riesgo a lesiones.
Un plan de entrenamiento adecuado sería entrenar tres días por semana en sesiones de media hora. Empieza con una intensidad baja y según tus sensaciones ves aumentado la dureza de cada sesión. Deberíamos ser capaces de entender qué es lo que necesita nuestro cuerpo en cada momento.
El poder de la mente
La mente también juega un papel muy importante en tu objetivo de reemprender la actividad física.
Todos tenemos en nuestro interior una vocecita que nos dice que es mucho más cómodo y placentero no hacer nada, continuar como hasta ahora. Estamos en una zona de confort que hay que romper.
¿Sabes una buena manera de romper relaciones con esa vocecita?
Cuéntales a tu pareja o a un amigo muy íntimo qué es lo que pretendes hacer. Seguro que si alguien está pendiente de ti lo conseguirás finalmente. No hay nada mejor que comprometerse con alguien para lograr los objetivos. Funciona muy bien con aquellos que quieren dejar de fumar. Y en este apartado seguro que también funciona.
Moverse. El deporte o cualquier actividad física es fundamental para tu salud. Evita un montón de enfermedades. Las que están aumentando en la actualidad son todas las relacionadas con el sobrepeso y la obesidad, también en niños que están alcanzando cifras realmente alarmantes.